El pasado 4 de mayo elementos policiales del municipio de Ixtlahuacán de los Membrillos en Jalisco detuvieron, con lujo de violencia, a Giovanni López, joven trabajador de oficio albañil cuyo único “delito” fue no portar cubrebocas en la vía pública mientras se encontraba con su familia, acto que, cabe destacar, no se encuentra catalogado como falta administrativa por lo que no es motivo legal de detención. Fue aprehendido violentamente, siendo trasladado al Hospital Civil de Guadalajara en condición grave de salud. Giovanni fue posteriormente localizado por su tía en el Servicio Médico Forense, con lesiones en el cráneo y cuerpo que evidenciaban que había sido víctima de tortura, además de una herida de bala en la pierna. La explicación que se ofreció a la familia es que se les había ‘pasado la mano’ con las prácticas habituales de intimidación y tortura que utilizan las fuerzas de seguridad.
El presidente municipal de Ixtlahuacán, Eduardo Cervantes Aguilar buscó el silencio de la familia y les ofreció 200,000 pesos para que no levantaran una denuncia. Doscientos mil pesos vale la vida de un trabajador asesinado por las fuerzas represivas y la dignidad de la familia. A un mes del asesinato de Giovanni, los homicidas y sus cómplices siguen libres y en la totalidad de sus funciones.
El día 04 de junio se llevó a cabo una manifestación el centro de Guadalajara, después de que se hiciera público el video de la detención de Giovanni y la noticia de su asesinato. Como estrategia de contención el estado desplegó las fuerzas represivas contra lxs manifestantes, arrojando gas lacrimógeno y realizando detenciones con uso excesivo de la fuerza, dejando incluso inconscientes a algunxs de lxs detenidxs. Unas horas más tarde el gobernador Enrique Alfaro realizó un comunicado público en donde niega el uso de la fuerza e incluso concluye que la actuación de la policía fue mesurada a adecuada.
No olvidemos que el gobernador de Jalisco, Enrique Alfaro, ha repetido en más de una ocasión medidas represivas contra comerciantes, estudiantes y población civil en general. En el contexto de la cuarentena por el COVID-19 ha reiterado su disposición a utilizar la fuerza policial para hacer acatar las disposiciones sanitarias, anunciando medidas punitivas y de restricción a la movilidad en una clara demostración de su política neofascista. El gobernador impone el confinamiento obligatorio, sin antes asegurar las condiciones mínimas y dignas de subsistencia dentro de los hogares tapatíos, condenando y criminalizando a lxs trabajadorxs que necesitan salir a buscar el sustento diario. En Jalisco compiten por nuestra muerte el virus, el hambre y la violencia policial.
Repudiamos las tácticas represivas y despóticas con que el estado impone el orden y la ley, que sabemos se traduce en estabilidad y tranquilidad para la burguesía y sus servidorxs. La policía es una institución por sí misma violenta contra el pueblo, ya que se constituye en el seno del estado capitalista y no vela por la seguridad del pueblo, si no por los intereses del poder. Mientras sea la burguesía quien ostente el poder, la seguridad no será para el proletariado. Para el estado burgués cualquier manifestación de dignidad, resistencia e insurgencia por parte de nosotrxs es una justificación suficiente para torturarnos, violarnos, desaparecernos o asesinarnos. El caso de Giovanni no es aislado, en todo el país las fuerzas policíacas en clara unión con el crimen organizado son constantemente autores de ejecuciones extraoficiales y desapariciones forzadas.
Es por todo lo anterior que EXIGIMOS:
- Justicia para la familia de Giovanni y castigo a todos los perpetradores de tan cobarde y vil asesinato, desde los policías, el presidente municipal de Ixtlahuacán hasta el gobernador del Estado. Que el crimen sea investigado por asesinato y no únicamente por abuso de fuerza.
- Liberación inmediata de lxs compañerxs detenidos, además de que se garantice su integridad y el respeto a sus derechos humanos SIN EL PAGO DE FIANZA.
¡Giovanni López no murió, la policía lo asesinó!
¡Sólo en el socialismo otro mundo es posible!
Juventud Comunista de México en Jalisco
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