Cuando se intenta fotografiar a una persona se tienen dos opciones, hacerlo desde lejos y obtener una foto sin vida o forjar lazos de amistad con el retratado y captar su esencia en un trazo de papel. Así lo entendió Tina Modotti, una italiana que compenetro íntimamente con el pueblo mexicano retratando su rostro más austero y marginal, pero también más rebelde y combativo.
Nacida el 16 de agosto de 1896 en el poblado de Udine Tina conoció desde muy pequeña los estragos del sistema capitalista, pues su familia era de extracción humilde, su padre era obrero y su madre se dedicaba a las tareas del hogar. Fueron esas mismas condiciones en las que vivían las que obligaron a la familia Modotti a mudarse en 1913 a la ciudad de San Francisco.
Tina Modotti desempeño como trabajadora textil, modista, actriz, modelo y luego, cuando conoce al fotógrafo Edward Weston, toma la cámara y desde ese momento no se separa de ella.
Entre los años 1923 a 1930 permanecerá en México, convirtiéndose en activista revolucionaria, además de asociarse con el Partido Comunista Mexicano en 1927. Es en nuestro país dónde realiza la mayoría de su obra, siempre enfocada a los sectores más vulnerables de la sociedad, retratando la miseria e injusticia de su época.
En 1928 comienza un romance con Julio Antonio Mella, pero éste muere asesinado en 1929 y la acusan de ser cómplice del crimen. Sin embargo, se le declara inocente poco después. Al año siguiente la acusan de haber tomado parte en el intento de asesinato de Pascual Ortiz Rubio, presidente de México, por lo que es expulsada del país. De allí salió acompañada del líder comunista Vittorio Vidali, rumbo a Alemania.
En 1934 partió hacia España. Durante la Guerra Civil Española se alistó en el Quinto Regimiento y trabajó en las Brigadas Internacionales, bajo los pseudónimos de María, Carmen Ruiz y Vera Martini. Cabe destacar que durante el transcurso de la guerra renunció a realizar una sola fotografía, para ella no era compatible el arte con la violencia de los acontecimientos, se sentía incapaz de retratar lo que veía y optó por la lucha armada.
En 1939 regresó como asilada a México, donde continuó su actividad política, a través de la Alianza Antifascista Giuseppe Garibaldi. En 1940, el presidente Lázaro Cárdenas anuló su expulsión. Murió de un ataque cardíaco el 5 de enero de 1942 en el interior de un taxi.
En estos tiempos convulsos en el que los mass media predominan en el imaginario colectivo, en el que las redes sociales han ido sustituyendo a los periódicos y en el que una imagen viaja en el ciberespacio a una velocidad equiparable a la del sonido, urge seguir el ejemplo de personajes que como Tina han usado la fotografía como un arma para denunciar los males que aquejan a nuestro mundo, para recordarnos que existen otros mundos que aun resisten los embates del capital.
Es por eso que surge el Colectivo Tina Modotti, cómo una trinchera que busca agrupar a fotógrafos, periodistas independientes, estudiantes y artistas alternativos del área metropolitana del Valle de México que estén dispuestos a retratar nuestra realidad, a mostrar la cara curtida del México de abajo y a la izquierda y a luchar por construir una sociedad más colorida, en la que la gente pueda sonreír.
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