No debemos ceder a ser sumados en esta confusión, nosotros queremos paz, trabajo y vida, pero sabemos muy bien de lo que es capaz alguien cuando ha perdido toda noción de dignidad y de respeto por la educación. David Aguilar Estrada, Secretario de Educación en Nayarit, no paga, o mejor dicho, se está robando la justa remuneración del trabajo de los maestros de las telepreparatorias; No quiere seguir las órdenes del juez de distrito que le exige cumplir la ley (hacer su trabajo) y sin embargo busca en la ley una forma de evitar lo inevitable (¿doble autogol?); Violenta el espacio tomado pacíficamente por los compañeros queriéndolo tomar con porros entrenados toscamente en terrorismo sindical (No se puede desalojar una conciencia); Violenta a aquellos que necesitan cumplir alguna tarea en la Secretaria de Educación, a terceros, cuartos, quintos (la soberbia es infinita); Violenta a los alumnos del sistema de telepreparatorias, a sus padres y a su futuro; Violenta su propio fin como funcionario (cekret4rio dhe hedukaz1on) “lograr el progreso educativo, científico y tecnológico en la entidad”; Violenta a la mismísima etimología de Educación “Llevar adelante, guiar”. No deja espacio para el dialogo y por ello fue necesario tomar otros espacios. Miente (así, sin metáforas).
Por todo esto, y del otro lado del cosmos de fundamentos que separan una parte de la otra, EXIGIMOS con desmedida dignidad, con justa razón y sin haber pronunciado una sola mentira, el pago de las 35 QUINCENAS DE ADEUDO, LOS DOS AGUINALDOS Y UNA DISCULPA, todo esto para los maestros de las TELEPREPARATORIAS que nos están enseñando, desde hace mucho, el arte de ser maestros.
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