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20733069 791970110980931 718227688 nPara comprender las movilizaciones estudiantiles de los últimos años en la unidad académica de humanidades es necesario conocer un poco de la historia del movimiento estudiantil en la UV, concretamente del Comité Universitario de Lucha y su ideología marxista que en la década de 1970 lideraba el campo de las ideas y la crítica dentro de la unidad.

El movimiento del 68 fue una coyuntura favorable para los movimientos sociales, permitió dar impulso a la organización estudiantil en la universidad; en humanidades, para la apertura a perspectivas y análisis críticos de la realidad nacional y latinoamericana. Pero este movimiento es parte de una cadena de situaciones a lo largo de la década de 1960.  En este periodo se hace evidente el agotamiento del modelo de desarrollo dominante, que había tenido crecimiento con cierto fortalecimiento a la economía; empieza a tener problemas por su carácter polarizador, es decir, si bien es cierto que hay un crecimiento económico al mismo tiempo consiente una concentración de los capitales y se da una polarización social donde ciertos sectores de la población urbana, pero sobre todo la población rural, entran en un proceso de empobrecimiento.

 

 

A la par comienzan a organizarse movimientos urbanos, sobre todo de colonos  sin hogar que invaden terrenos, a partir de eso empiezan a luchar también por obtener apoyos de programas sociales, servicios. Entonces lo que se asoma de entre las calles y campos en la década de 1970 es un crecimiento de los movimientos populares, eso mismo fortalece a los movimientos estudiantiles y en esa coyuntura es donde se fortalece el movimiento estudiantil de Xalapa.

Después del 68 en la facultad de humanidades se forma un Comité Universitario de Lucha en el que participaban alumnos de antropología, historia e idiomas; era un movimiento estudiantil que permanece a pesar de la represión. En 1974 una nueva generación de estudiantes ingresa a las facultades de antropología, historia, idiomas y pedagogía, muchos se incorporan al comité, pero los modelos académicos tradicionales nada tenían que ver con ese movimiento. La nueva generación  planteaba una perspectiva crítica que al mismo tiempo debía ser fuerte académicamente, es decir, influir en los procesos académicos universitarios y en el plan de estudios, tenían la obligación de ser los mejores estudiantes, pero al mismo tiempo no buscaban ser un movimiento aislado, sino que debía estar vinculado con el movimiento popular.

“Los estudiantes de humanidades tenían un proyecto claro e interesante, sobre todo en los 70’s; la construcción de autonomía, de gestión. Lo que distinguía al universitario estudiante en los 70 y 80, era la idea de la gestión organizacional y política autónoma. El profesor colaboraba, pero no era el protagonista, los profesores éramos colaboradores, pero el protagonista fue el estudiante.” (Dr. Federico Colín. 09/09/2016)

Es a partir de 1975 que ingresa el marxismo como una perspectiva analítica en un plan de estudios, gracias a un movimiento estudiantil fuerte que se concentra en una generación de estudiantes de la facultad de antropología, integrantes del Comité Universitario de Lucha. Después de años de trabajo y organización, una serie de obstáculos impuestos por el gobierno del estado y de la propia universidad, perdería este comité y la facultad de antropología la estafeta del movimiento estudiantil xalapeño. Pero la experiencia adquirida y el plan de estudios elaborado bajo la perspectiva marxista consolido un movimiento para la fundación de la facultad de  Sociología en 1976 con un plan de estudios influenciado por la organización y trabajo de antropología.

“Olvidamos a los difusores, a los divulgadores de la teoría marxista. Una política bien construida desde la idea se la divulgación, editoriales que constituyeron puentes de conocimiento del marxismo, en México: Editorial Era, Siglo XXI, Fondo de Cultura, Nueva Imagen, Joaquín Mortis. Y había editoriales pirata, un movimiento de política cultural editorial, basado en la clonación de libros. Se clonaban libros de Venezuela, Argentina, Chile, Editorial Castilla. Había un grupo de ediciones en América del sur y España, las grande ediciones de Taurus, Anagrama, grandes difusoras del marxismo. Gedisa ya en los 80. Hay que reivindicar el papel de las ediciones pirata. Incluso en antropología un grupo de estudiantes y el profesor René Cabrera formaron un colectivo para divulgar no solo la teoría marxista sino también la crítica al marxismo y otras opciones y así se llamaron, “Ediciones Pirata”, tenían su cubículo aquí en la unidad y la idea era clonar textos bajo una visión no progresiva de la teoría crítica sino bajo una visión miscelánea anti doctrinaria del marxismo. Pero en América hay otras editoriales que divulgaron lo contrario, que se volvieron divulgadores del anti marxismo.” (Dr. Federico Colín 09/09/2016)

Había distintas vertientes de análisis marxista, sobre todo porque tenían posiciones políticas y afiliaciones a los procesos que se estaban viviendo a nivel mundial. Entonces existía un marxismo vinculado a la visión del Partido Comunista Mexicano y a la Unión Soviética, un marxismo leninista en oposición del trotskismo y por otro lado estaba la perspectiva influenciada por el maoísmo. En el caso de Xalapa y la Unidad de Humanidades, entre los jóvenes, el estudiantado y las organizaciones de izquierda, las orientaciones ideológicas comenzaban a balancearse entre el leninismo y sus diferencias con el maoísmo.

Entonces los debates en torno a la orientación de la organización estudiantil se basaban, por un lado, hacia un posicionamiento de izquierda revolucionaria con una perspectiva maoísta;  por otro lado  se pensaba que debía ser un movimiento estudiantil de vinculación con el movimiento popular, no pensando en ser la dirigencia del movimiento popular sino una relación de solidaridad y de apoyo para el fortalecimiento mutuo, sobre todo porque en la universidad no había ningún foco de organización o movimiento, no había sindicatos, no existía aun el SETSUV. Era una situación donde el movimiento estudiantil se veía muy limitado y  enfrentado a toda una estructura universitaria que no era partidaria de las perspectivas críticas de izquierda.

Con la  reforma al plan de estudios de 1975, que tuvo una vigencia de 10 años donde el núcleo central de la formación antropológica era el marxismo, se dio un giro radical a la educación y los programas tradicionales de formación en la carrera de antropología

El plan de estudios de antropología tenía un área de economía política donde se comenzaba a leer a los clásicos, Marx y Engels, en el caso de filosofía se partía de lo original, algunas cosas de Lenin también. Par estos años había una corriente europea muy fuerte,  Altusser que influye en la elaboración del plan de estudio. El enfoque que se manejaba, más que una crítica radical, era una perspectiva global y de análisis crítico al sistema capitalista y que en base en ello había que articular teorías que permitieran explicar y proponer alternativas metodológicas.

El comité mantuvo el liderazgo de la organización y con él los estudiantes de la facultad de antropología hasta 1979 cuando se funda sociología. A partir de ese momento comienza a crecer  la organización estudiantil en la nueva escuela a la par del declive de antropología debido a la salida en ese mismo año de la generación de estudiantes más activos, politizados y organizados. Con esto prácticamente la organización y las acciones colectivas dentro de la unidad se fueron agotando sobre todo porque al momento de la salida de esta generación se da una contraofensiva de las autoridades universitarias y los profesores que no eran marxistas, que tenían otro enfoque dentro de la facultad.

Inicialmente solo estaba el comité, después apareció una agrupación trotskista fuera del comité, Liga Obrera Marxista (LOM). Fuera de la universidad existía un colectivo que se llamaba Alianza Obrero Campesina Estudiantil que formaba parte del PCM, había gente ligada al movimiento obrero a través del sindicalismo ferrocarrilero pero esa gente ligada al movimiento ferrocarrilero no andaba en la universidad. A pesar de esto el comité daba pie a una diversidad de formas de organización y acción colectiva.

“Había organizaciones con siglas, por ejemplo, el Movimiento Estudiantil de Reivindicación Popular, Colectivo 2 de abril, un colectivo cercano a la liga 23 de septiembre. Había otros colectivos que reivindicaban el movimiento popular y colectivos anteriores a humanidades, estaba el Colectivo che Guevara, el Grupo de artes Mao tse tung con estudiantes de danza, teatro, artes y antropología. Colectivos de danza, de teatro, de música folclórica latinoamericana, colectivos vinculados con campesinos y obreros. Aquí se combinaban tres cosas; el colectivo de la creación y gestión artística; el de la comunicación en la calle, el que sensibilizaba y creaba conciencia en la gente, comunicar los problemas de la calle; y los colectivos ya conformados por estudiantes y profesores que gobernaba, por así decirlo, el espacio de las ideas que circulaban en la UV. Estos colectivos estaban en los institutos de investigación, en las facultades y posteriormente en los consejos estudiantiles. Había una incubadora ahí, estas formas de organización permitieron colectivos con esta idea autogestiva y constantemente estaban en las plazas, en las calles y también buscando esta relación entre las facultades con eventos y actividades conjuntas. Te estoy hablando de los setentas, ochentas. Ya en los noventas ya no se ve esto.” (Dr. Federico Colín 09/09/2016)  

Durante el esplendor del comité muchas fueron las acciones que de su organización y vinculación surgieron, también al calor de las circunstancias nacionales. De entre ellas el apoyo a las primeras huelgas y movilizaciones del SETSUV y la fundación de la Facultad de Sociología.

En 1975 surge el primer sindicato, el SETSUV tras largas jornadas de mucho trabajo para consolidarse. Se lanza la huelga por su reconocimiento, como se temía la llegada de porros de varias escuelas, los estudiantes toman la facultad y en la madrugada se la entregan a los trabajadores. Se hizo un recuento y se quedaron con el contrato colectivo SETSUV del que gozan hasta la fecha.

En esa primera huelga que hizo el SETSUV no solo recibió el apoyo en humanidades, ni únicamente el de los estudiantes. Los profesores de humanidades, incluso de otras escuelas, por ejemplo arquitectura, dieron apoyo en guardias, en marchas; participaron en la discusión, haciendo volantes, porque en ese tiempo la única forma de expresarse era con un mitin relámpago, en los camiones, con volantes y como estudiantes en el consejo universitario defendiendo la formación del sindicato.

En ese prospero año del 75 el Comité de Lucha también se vincula con una organización campesina que era la CENTRAL CAMPESINA INDEPENDIENTE de Ansos Palomino (quien era un líder comunista) que después se constituye en la Unión Campesina Independiente, que trabajaba en Puebla y Veracruz.

Basándose en el ejemplo de la UNAM y el SPAUNAM, se intenta fundar el SPAUV en 1976 en todas las regiones con campus universitario de Veracruz. El intento en varias partes del estado fue fallido, incluso el sindicato no sobrevivió a su huelga por el reconocimiento y después se funda el sindicato blanco, el FESAPAUV.

Sin duda una de las más importantes conquistas del Comité fue la fundación de la Facultad de Sociología. En el comité se discutía, después de la reforma al plan de estudios, sobre la formación de una facultad de sociología, discusión que se dio  en términos de ampliación del pensamiento crítico, incluso en términos de fortalecimiento político de humanidades con la aparición de otra facultad.

La idea la retoma el director, Paco Córdoba, y en la última junta academia que se dio aún en Juárez, él propone la creación de sociología. La administración central ve con buenos ojos la creación de sociología pero leyendo también que se quiere un reforzamiento político e ideológico por lo que sociología se crea pero en un principio no estaría en humanidades sino en Derecho. Entonces comenzó una lucha, primero para fundarla, se formó un comité de aspirantes a la facultad de sociología y se hizo toda una gestión ante las autoridades universitarias.

 La defensa de la propuesta de sociología se hizo por  estudiantes en el concejo universitario y con profesores. Se creó un plan de estudios con ayuda de algunos profesores que llegaron de la Ciudad de México, fue muy importante en ese momento René Cabrera, que primero vino a dar cursos intensivos y después dos años más tarde concursó y ganó una materia de tiempo completo; y otros profesores que llegaron, por ejemplo del CCH. Pero la creación de sociología y la argumentación, todo giro en torno a ¿Por qué crear sociología si ya existía antropología? ¿Cuáles eran sus diferencias?

Finalmente en el Consejo Universitario se aprueba la fundación de Sociología a partir de la defensa de la propuesta, La elaboración de un plan de estudios  se hizo en el cubículo de la representación estudiantil. Con la propuesta elaborada, esta se planteó y fue inmediatamente aprobada. La primera generación no quería estar en derecho, terminó siendo una dicotomía porque no querían estar ni en derecho ni en humanidades, sino en un local aparte en la calle de Bravo, pero a sus años sociología ya estaba en la unidad, en las tierras del ejido de San Bruno. Las autoridades no pudieron capitalizar la fundación de esa carrera para fines de una contra ofensiva. Sociología fue un reforzamiento, primero para antropología, después sociología tomaría la estafeta del Comité y la organización en humanidades.

Además de la revisión teórica, la prioridad para el comité y las facultades de Antropología y Sociología fue el apoyo a las luchas populares que eran bastante intensas en esos años; dos fueron las fundamentales: la lucha por el territorio urbano y la lucha por la tierra, entonces en la unidad se recibían campesinos, se les acompañaba a sus trámites, etc. y  sociología, más tarde cuando terminó el auge político del Comité de Lucha alrededor de 1980, tomo la estafeta por varios años más. Durante toda la década de 1980 se enfocaron en brindar apoyo a organizaciones externas a la universidad y a la Unidad de Humanidades

“Recién nos tocó una represión a una huelga de camioneros de Autobuses Unidos, hubo una matanza, entraron echando bala y se trajeron un camión que estuvo casi un año aquí, que fue un elemento de negociación con los choferes. Más tarde los sacaron de la empresa, algunos se convirtieron en choferes de UV.” (Prof. Jorge Solano. 16/06/2016)

Llegó un momento en el que aparecieron las primeras divisiones dentro del comité de lucha. Ya hacia el final de la carrera de la generación de 1979 era claro que había dos tendencias; una deja de participar y es crítica de algunos vicios  que se venían dando, se separa y deja de militar; la otra parte dejó de militar cuando salieron de la facultad. Esos restos del comité de lucha, que no tuvieron la capacidad de formar y reclutar gente para dar  continuidad se transforma en lo que ahora es el “Consejo Estudiantil”, que se incluye en las reformas de Bravo Garzón como una forma de organización que se compone por el “Consejo de Estudiantes”, o sea, representantes de estudiantes por salón, consejero estudiante, que se pueden reunir en consejo para discutir. En eso se transformó la representación estudiantil universitaria que ha venido mucho a menos con el paso de los años, incluso se ha intentado reactivar la idea del comité como representación pero ha sido limitado, incluso sin mucha definición ideológica.

Antropología ya había hecho crisis con el comité de lucha ya no le toco apoyar la lucha urbana, ese aspecto fue cubierto, por así decirlo, por sociología. Antropología deja de ser vespertino, lo que fue muy importante para su desmovilización y muchos estudiantes adultos con otras carreras pudieron continuar estudiando. La facultad se hizo más juvenil y eso fue muy importante en la reestructuración del estudiantado. Mientras tanto en sociología es donde aparecen diferentes facciones debido a una influencia guevarista, una izquierda revolucionaria que venía de Chile que criticaba a los comunistas y a la propia unidad popular de Salvador Allende y que proponía un incremento del proceso revolucionario.  Esta izquierda revolucionaria, cuando se da el golpe de Pinochet,  sigue escribiendo y llega a humanidades como un gran foco de influencia pero al mismo tiempo aparece en sociología tendencias trotskistas que venían de la LOM y comienzan las primeras fragmentaciones con  grupos orientados al maoísmo.

Aparecen los conflictos, varias facciones con desacuerdos y coincidencias, también grupos con diferencias ideológicas en la Facultad de Sociología pero es irrefutable que cuando el movimiento decae en antropología es en esta facultad donde resurge el movimiento y se fortalece por un tiempo. Y, entre otras conexiones, en sociología comienzan los trabajos con colonos. Finalmente el auge organizativo decayó y el ímpetu se encamino hacia nuevos medios de organización, orientados a la superación individual en el campo intelectual más que la vinculación con la realidad y quienes la padecen.

El marxismo se convirtió en solo un contenido más y eso se manifestó en el cambio del plan de  estudios después de 10 años en donde se decidió que el marxismo debía mantenerse dentro de las aulas, que los profesores continuaran enseñando marxismo, en la facultad de antropología, dicen algunos profesores, el marxismo nunca desapareció pero si fue extirpado de la organización estudiantil de humanidades y sus facultades más combativas.

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