A unas pocas horas de tomar las calles nuevamente de la Ciudad de Monterrey Nuevo León en la denominada “marcha de la diversidad”, me pongo a pensar sobre la necesidad de contrarrestar los discursos hegemónicos de la derecha al querer apropiarse para su beneficio las luchas que han llevado millones de personas pobres, en el mundo y en México en particular. Me quedo pensando en la lucha de clases que se ha vivido en la historia, y las luchas por el derecho a la identidad, no tan alejado dentro de la lucha de clases. Ejemplos muy concretos son la lucha de los trabajadores homosexuales de Francisco California en Estado Unidos por el respeto a su identidad, las luchas lesbianas, trans y gays contra la policía en esa misma ciudad[1], en México la heroica lucha del Frente Homosexual de Acción Revolucionaria, Grupo de Liberación Homosexual y Grupo Autónomo de lesbianas[2]  y a nivel local la lucha de las compañeras trans que conocimos apenas el años pasado en la pandemia y de quienes estamos muy orgullosxs de compartir lucha con todas estas colectividades en resistencia,  y a propósito de ello, elaborar una reflexión sobre el estigma y pobreza que viven nuestros hermanos y hermanas de clase a partir de la prevalencia del virus SARSCOV2 (Covid-19).

El año pasado como la mayoría nos hemos dado cuenta la pandemia causada por el Covid-19 hizo que muchas personas se vieran afectadas en supervivencia, siendo las más afectadas aquellas que están al margen de la producción de mercancías, pues mientras las empresas esenciales se hacían más ricas al distribuir mercancías, estas mismas hicieron crecer con rapidez incomparablemente,  mayor todavía la competencia, entre los trabajadores, es decir, disminuyen tanto más, relativamente, los medios de empleo y los medios de vida de la clase obrera y servicios[3], lo que para lxs Marxistas significa el “Ejército Industrial de Reserva”. En este sentido la prevalencia de la pobreza de sectores más marginados de la sociedad es un tema que merece nuestra atención, pues si bien la patronal ya se apropia de la riqueza de los asalariados y asalariadas, hay un sector de la población al margen que en términos  marxistas denominamos “Ejército Industrial de Reserva”, de manera simple estas personas ya sean por sufrir una discapacidad, tener un origen étnico específico, ser migrante o en este último caso tener preferencias sexuales distintas, les hace vulnerables a la crisis que a la mayoría de la población afecta, a veces con consecuencias mas adversas por las políticas de intolerancia y de discriminación de ciertos estados donde predomina el poder de la burguesía.

Apenas el 17 de mayo del año 2020 la comisión de expertos  independientes de Naciones Unidas en protección contra la violencia y  la discriminación por orientación sexual e identidad de género, presentó ante la Asamblea General de la Organización de Naciones Unidas un informe sobre el impacto de la pandemia de Covid-19 en los derechos humanos de las personas LGBTTTIQ+[4] , documentando lo que de por sí ya existía, es decir una afectación desproporcionada en el acceso a servicios de salud, seguridad alimentaria, estigmatización y discriminación en contra de miembros de estas comunidades siendo, como siempre, las personas más pobres las afectadas dentro de la marginación que conlleva  la aparición del multimencionado coronavirus, pero no solo la clase trabajadora se vio afectada por la prevalencia de la pandemia, también muchos jóvenes, estudiantes al trasladar su espacio de educación, donde para algunos conlleva un mayor desenvolvimiento social y por tanto las instalaciones educativas se convierten en una zona donde pueden expresar libremente su orientación sexual, identidad de género o expresión de género, hizo que “la salida del closet” fuera dentro de sus hogar, quedando en peligro su estabilidad física y/o mental al estar conviviendo con familiares agresores que por razones religiosas o de otra índole, son adherentes a los discursos de odio contra las personas de la diversidad sexual.

Esto aunado a las lamentables políticas restrictivas de los Estado burgueses en relación a los derechos civiles de las personas, como el caso de Uganda en África, donde hubo redadas masivas en refugios LGBTTTIQ+[5] bajo el pretexto de contención de virus estigmatizando a la población de dicha comunidad, donde según las autoridades “propiciaban los contagios” , pero no solo ahí en México, país con una tradición liberal de separación de iglesia y Estado, el obispo Ramón Castro Castro de Cuernavaca, Morelos afirmó apenas iniciada la declaratoria por la OMS que: “La pandemia de Covid-19 es un grito de Dios a la humanidad ante el desorden social, el aborto, la violencia, la corrupción, la eutanasia y la homosexualidad” [6], haciendo crecer con ello aún más el estigma y haciendo a la comunidad blanco de ataques por ya sea por el derecho a decidir o el derecho a ser como quiera ser.

Pero no solo en el tercer mundo ocurren este tipo de atropellos; en Europa, en este caso Hungría, la ultraderecha ha aprobado una iniciativa que en la práctica veta talleres escolares, libros y películas que aborden cuestiones de sexo y género[7] en perjuicio de las infancias trans y no binarias, caso muy parecido al denominado pin parental [8]que nuestra Organización en conjunto con otras Organizaciones de la sociedad civil pudo darle vuelta atrás en el Estado de Nuevo León[9].  

Otro de los escenarios graves es lo que pasa en América Latina, donde existen leyes retrogradas que no permite recolectar con fiabilidad cuantas personas trans son asesinadas, pues la mayoría de los ordenamientos civiles únicamente diferencian entre sexo “hombre o mujer”, dejando invisibilizada en las estadísticas cuando alguien muere por crímenes de odio, pues al no tener un reconocimiento civil, sus carnets de identidad no corresponden a su identidad sexual, no obstante lo anterior, estudios como el de la Corte Interamericana de Derechos Humanos ha logrado precisar que la esperanza de vida de una Persona trans es América Latina es de apenas 35 años [10], lo que significa que, una persona trans estaría entrando al rango de adulto mayor desde los 25 años, eso sin mencionar el rezago educativo y profesional, pues a su vez, una persona trans abandona su hogar por la discriminación vivida en la familia apenas a los doce años, dando un rezago en su proceso de alfabetización y como consecuencia una incursión menor a las oportunidades laborales, como en Argentina, donde el 80% de la población trans, no tiene un empleo formal. Es decir, son personas que jamás tuvieron un empleo formal, no tuvieron obra social, no tuvieron aportes jubilatorios, no tuvieron vacaciones pagadas y tampoco tuvieron el derecho al trabajo[11]

El anterior análisis, no tiene como intención hacer una diferenciación entre el proletariado cis género de quien no lo es, más bien persigue el fin de analizar y reflexionar sobre el papel de aquellos sectores precarizados por el capitalismo y la influencia de lucha que desencadena pronto una liberación más profunda al romper tabúes morales que mantienen alineado al proletariado a la ideología dominante, como lo son sus apartados ideológicos (iglesia y estado conservador) .

Finalizo mi análisis internacionalista, festejando con agrado el papel que ha forjado Cuba y su Revolución Socialista, sobre todo con el reconocimiento pleno en su Constitución promulgada en el año de 2019 donde se refrendan muchos de los derechos sexuales y las garantías para su ejercicio. En tal documento, el Socialismo estableció las bases mínimas de protección de los derechos de las personas con sexualidades no heteronormativas[12]. A su vez también es de celebrarse la misión internacional escuadrón 421 que en estos momentos ha llegado a Europa, ahora rebautizada como “Tierra Insumisa” con una representación no binaria [13] para demostrarle al mundo que mientras los Estado burgueses separan, el anticapitalismo une.

Ser rebelde es serlo contra todo lo establecido, contra todo lo que nos oprime y a las y los Comunistas nos corresponde aplicar la máxima de José Martí, es decir con las y los pobres del mundo echar nuestra suerte a andar.


[1] https://www.facebook.com/Colectivo-Sol-AC-209031852497196

[2] https://www.homosensual.com/cultura/historia/frente-homosexual-de-accion-revolucionaria-primer-movimiento-lgbtq-en-mexico/#:~:text=Al%20final%2C%20el%20Frente%20Homosexual%20de%20Acci%C3%B3n%20Revolucionario,de%20la%20comunidad.%20Frente%20Homosexual%20de%20Acci%C3%B3n%20Revolucionaria.

[3] Marx (1849): Trabajo asalariado y capital. (marxists.org)

[4] COVID and LGBT Report_20201008 (ohchr.org)

[5] ‘Nowhere to go’: los jóvenes ugandeses LGBT+ ‘salieron’ durante el encierro | | mundiales de desarrollo El Guardián (theguardian.com)

[6] Aborto, gays y eutanasia, culpables del Covid-19: obispo de Cuernavaca (excelsior.com.mx)

[7] Hungría aprueba una polémica ley que prohíbe la “promoción” de la homosexualidad ante menores (lavanguardia.com)

[8]https//www.facebook.com/jcomunistademexico/videos/2394719090827804

[9]

[10] Comisión Interamericana de Derechos Humanos, “Violencia contra las personas LGBTI América”, Diciembre 2015. párr. 255

[11] Más del 80% de las personas trans, no tienen un empleo formal (lv12.com.ar)

[12] http://www.granma.cu/cuba/2021-05-17/derechos-sexuales-seguir-conquistando-la-cuesta-17-05-2021-00-05-13

[13] Francia: encuentro con la diversidad sexual y delegación zapatista – Avispa Midia

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